Hay ciertos productos que la fabricación en tiradas cortas puede ser económicamente inviable. Nos encontramos muy a menudo que lo tenemos que explicar a nuestros clientes. Hablamos, pues, en este caso, de los adhesivos de doble cara o doble visión.
Definición de los adhesivos de doble cara:
Un adhesivo de doble cara o doble visión son los que pegados detrás de un vidrio, hay una imagen que se ve por la parte exterior y otro por la parte interior.
Como ejemplo más conocido hablaremos de los adhesivos que se pegan en los escaparates de los establecimientos. Normalmente estos adhesivos se pegan por el interior para evitar su vandalismo.
Otro ejemplo conocido serían los adhesivos de mantenimiento de vehículos que describimos en [este post] (# 013C).
No confundir con los adhesivos interiores, que no son de doble visión.
Fabricación de los adhesivos de doble visión:
La dificultad importante es conseguir que no se mezclen las dos imágenes una vez colocados los adhesivos en el cristal
Estos adhesivos hay que imprimirlos sobre un vinilo transparente, con tres fases diferenciadas.
Para que se vean las dos imágenes simultáneamente debemos imprimir primero la imagen que se verá por el exterior. Esta impresión se imprimirá en forma invertida.
La segunda fase sería imprimir unos fondos opaco para impedir que no se mezclen las imágenes.
Por, último, la última fase es imprimir la imagen que se vio por la parte interior. Esta vez sí, la imagen no hay invertirla.
En el caso de que la colocación de los adhesivos sea por el exterior del vidrio, el sentido de las imágenes hay que invertirlas, a la hora de la impresión.
Consideraciones económicas:
Como se ve, pues, es un procedimiento muy laborioso ya que a menudo hay que utilizar dos sistemas de impresión para hacer un producto de calidad. Nosotros utilizamos la serigrafía para hacer los fondos de separación ya que es la manera de conseguir más opacidad.
La capa de separación implica imprimir tres tintas, blanco opaco, un gris cubriendo o plata opaca, y por último otro fondo con tinta blanca opaca. Como se ve, ya hablamos de tres tintas sólo para conseguir separar las dos imágenes. Esta capa de separación no se consigue con digital ya que, aunque los blancos son bastante opacos, hay que poner la tinta plata. Es decir, no es suficiente.
Las imágenes a imprimir para las dos bandas son cuatricromías, entonces hay que imprimirlas en sistemas adecuados. Normalmente es la impresión digital la que se utiliza. Para tiradas largas hay que hacerlo con offset.
Si las imágenes se pueden reproducir con tintas planas, se puede hacer todo con serigrafía y por lo tanto se facilita el proceso al no tener que utilizar dos tecnologías de impresión diferentes.
Como se ve, si contamos tintas, debemos sumar las de una cara, las del medio y las de la otra cara.
Como se ve, pues, las tiradas cortas quedan muy penalizadas por el gran número de tintas a utilizar y a menudo por la necesidad de mezclar tecnologías.
Alternativas:
A veces, la capa de separación se hace colocando un vinilo blanco opaco para separar las dos caras. Pero no siempre es posible y en todo caso es un procedimiento muy laborioso.
Como opción, se puede fabricar dos adhesivos sobre vinilo blanco, uno para colocar por fuera y otro por dentro del cristal. Esto suele salir mejor de precio pero se dificulta la colocación in situ y la mayoría de clientes no les gusta esta solución.
Conclusión:
Como se ve, pues, se trata de uno de los adhesivos más complicados de fabricar. En Difasa los fabricamos a menudo y por tanto no dude en contactarnos si necesita este tipo de adhesivos. Estudiaremos en todos los casos, cuál es la mejor opción.